Batman Arkham Origins
Sergitron
Warner Bros. Games Montreal
Warner Bros. Interactive Entertainment
59,95 €
No hay dos sin tres
Cuando se supo de forma pública que Warner Bros Montreal sería el estudio que iba a desarrollar la tercera entrega de la saga Arkham, protagonizada por el detective más oscuro y duro de la historia, muchos nos llevamos las manos a la cabeza. Rocksteady dejó el listón muy muy alto con dos obras de arte en forma de videojuego, como fueron Arkham Asylum y Arkham City. Estos títulos mostraban a Batman como nunca antes un videojuego había sabido hacerlo, técnicamente eran juegos de primer nivel y ambos conjugaban de manera impecable una mezcla inteligente de acción y sigilo: El equilibrio perfecto para que la fórmula funcionara y jugablemente dejara huella.
Y ese es precisamente el verdadero problema a la hora de desarrollar este Arkham Origins, la falta de identidad propia y la multitud de ideas prestadas de los juegos anteriores restándole originalidad, ya que aprovecha el espectacular legado dejado por Rocksteady. ¿Es malo ser continuista de una Obra Maestra? Pues en parte sí que puede serlo. Este título bebe mucho de los anteriores pero sobretodo de Arkham City. De hecho, habrá momentos en el juego que no tendremos claro si es un juego u otro salvo por pequeños detalles. El conformismo (o excesivo respeto a la saga) por parte de Warner Bros Montreal es un arma de doble filo, ya que te aseguras algo muy bueno, pero el no arriesgar en absolutamente nada puede resultar molesto para los fans de la saga o para los que esperaban algo más. Innovar o mejorar un producto sobresaliente es complicado y con esa premisa ha tratado Warner Bros Montreal el desarrollo del juego en todo momento. El exceso de respeto al trabajo realizado por Rocksteady hizo el resto.
Esto ya lo habíamos jugado antes, ¿no?
Esa es la pregunta que nos haremos cuando juguemos por primera vez a Arkham Origins (siempre y cuando hayamos jugado a los anteriores), todo nos resultará muy familiar. El juego empieza de forma un poco híbrida entre Asylum y City. Después de un primer vistazo a la Batcueva haremos un pequeño tutorial ingame en la penitenciaría Blackgate, donde aprenderemos a usar los gadgets disponibles desde el inicio, a movernos sigilosamente, a derribar a enemigos discretamente, etc… Todo muy similar a lo que vimos en el primer título de la saga. Una vez derrotado el primer boss, tendremos disponible la piedra angular de todo sandbox, en este caso, toda la ciudad de Gotham. En ella se desarrollará la mayor parte de la aventura y servirá de nexo de unión entre los lugares clave en la trama.
50 son los millones de dólares ofrecidos por Máscara Negra por la cabeza de Batman, una recompensa lo bastante suculenta como para que varios de los mejores y más letales asesinos del mundo vayan tras el hombre murciélago. Villanos a la altura de Cocodrilo Asesino, Deathstroke, Electrocutor, Bane o Copperhead entre otros. Todo ello acontecerá en una larga Nochebuena, con un Batman que está empezando a ganarse su reputación en Gotham. Más joven, más inexperto y sobretodo más duro e implacable que nunca. Ese es el argumento principal de este Origins, bastante atractivo y comiquero, todo hay que decirlo.
Jugablemente encontraremos una gran aventura, una historia que si bien no tiene giros espectaculares ya que muchas cosas se ven venir de lejos, es quizás una de las mejores de la saga Arkham. Además, las cinemáticas ayudan a sumergir al jugador de lleno en la trama. Tiene bastante contenido a modo de misiones secundarias (como es habitual en toda la saga) pero con muchas misiones repetitivas y cansinas que hacen que completarlas pierda un poco de interés. En las batallas contra algunos jefes, el sistema de combate ha sido levemente retocado, lo que vuelve dichas batallas más dinámicas y cinematográficas si cabe. A los más puristas puede que el cambio no les guste demasiado, pero ha sido un intento de al menos mejorar un apartado ya sobresaliente. También se han incluido los guantes eléctricos vistos en el excelente Arkham City Armored Edition de Wii U, que a base de golpes se irán cargando de energía hasta que al llegar a su cénit rebosen de electricidad y al golpear a los enemigos les infrinjan el doble de daño de lo normal. Un acierto el haberlos incluido. A pesar de ello, creo firmemente que la inclusión del Batmovil, la Batmoto o del Batplano en forma de vehículos (de manera jugable, controlados por el jugador) para desplazarnos por la ciudad de Gotham habría sido una novedad jugosa que realmente aportaría a la saga, pero no han querido arriesgar demasiado, conformándose con el viaje rápido de un punto a otro del mapeado a través del Batplano -por ejemplo- viajando rápido al norte de la ciudad aparecerá una cinemática donde la aeronave vuela rápidamente hacia su destino y después suelta a Batman en el lugar seleccionado… Todo automatizado.
Una de las pocas novedades incluidas en este título, es que al terminar la partida en el modo “Nuevo Juego +” (un modo más difícil sin advertencias visuales para los contragolpes), se desbloqueará un nuevo modo de juego llamado “Yo soy la Noche”, donde el reto estará en pasarse el juego con una sola vida y sin poder guardar la partida en ningún momento, todo con la dificultad aumentada aún más. Sin duda un desafío colosal que pondrá a prueba a los más hábiles con el mando, aunque el hecho de que no se pueda grabar la partida le resta atractivo ya que la aventura principal dura sobre 10-12 horas y se antoja excesivo terminarlo de una sola tacada por muy Batman que seas.
Luces y sombras en el apartado técnico
Técnicamente no aporta nada nuevo a lo ya visto en los otros dos juegos de la saga, hablando claro. De hecho tengo que decir que he tenido la oportunidad de compararlo con Arkham City de primera mano y sí que se notan diferencias entre ambos, pero es que este Origins sale perdiendo. La diferencia más grande la encontramos en la iluminación y sombreado de los escenarios, todo un paso atrás incomprensible que no sólo se queda ahí sino que se agrava por culpa de unas texturas muy pobres visibles si nos aproximamos a ciertas puertas y paredes. Donde mete la puntilla del todo gráficamente (para peor, no seáis mal pensados), es en los modelados de los personajes, con menor carga poligonal y menos realismo que todos los vistos en Arkham City. Inexplicable.
Aun así sigue luciendo bien y visualmente es bastante llamativo pese a las carencias mencionadas. Cualquiera que nunca haya jugado a un juego de la saga y pruebe este Arkham Origins se verá deslumbrado, ya que sigue presentando un apartado gráfico potente.
Tenía mucha curiosidad por ver cómo representarían a Gotham City en este juego, qué aspecto tendría y cómo sería patear esa mítica ciudad bajo la máscara de Batman, pero hay varios puntos que destacar. Sigue conservando todo el mapeado visto en Arkham City con las mismas zonas y los mismos edificios, con el añadido de un largo puente que une el mapeado con la zona nueva de Gotham (que por cierto, es bastante pequeña). Llama poderosamente la atención la prácticamente nula “vida” que hay en la ciudad aunque argumentalmente esté razonado, ya que hay un toque de queda en esa Nochebuena y los habitantes de Gotham están encerrados en sus casas por precaución (y ya de paso excusamos las limitaciones técnicas de aquella manera). Pero es totalmente inverosímil que no haya ningún coche circulando por la ciudad o no veamos a ningún transeúnte por las calles. Sólo veremos a maleantes en diversos guetos esparcidos por todo el mapeado. Hay menos vida en Gotham que en toda Santa Destroy (No More Heroes), y eso ya es un decir…
He sufrido algún que otro tirón en algunas peleas o vuelos por la ciudad, una bajada de frames puntual nada importante, totalmente perdonable dada la magnitud del título, pero un poco de depuración y de más tiempo de testeo sí que echo en falta, ya que he sufrido algunos bugs tontos (como un teléfono movil flotando en el aire) y otros bastantes molestos, como que al recibir un nuevo ítem se me congelara el juego obligándome a reiniciarlo o ver como un enemigo se queda enganchado en una cabina de teléfono sin posibilidad alguna de poder alcanzarme. El gel explosivo acabó con su sufrimiento, pero deja mal sabor de boca encontrarse con estos problemillas durante la partida.
La banda sonora es impresionante como en toda la saga, llena de epicidad y acompañando de manera intachable cada secuencia de la aventura, todo muy cinematográfico. Además, como es habitual, el juego está totalmente doblado y traducido al castellano con un doblaje de primer nivel.
Conclusión
A la hora de recomendar este título tendríamos que tener en cuenta varios factores, ya que cada jugador busca una experiencia distinta, por supuesto. Si nunca has jugado a un juego de la saga, este juego es altamente recomendable. Si has jugado a los anteriores, lo recomendaría siempre y cuando el jugador sepa a ciencia cierta lo que se va a encontrar. Mucha diversión, una aventura con una historia genial donde nos enfrentaremos a muchos de los villanos más carismáticos y temibles del universo Batman, un montón de misiones secundarias típicas en la saga que entre coleccionables, logros y desafíos nos mantendrán durante muchas horas pegados a la consola.
Warner Bros Montreal nos ofrece un título continuista que más bien parece un Arkham City 2.0, no ambiciona en nada y mantiene todo lo ya visto pero no al mismo nivel. Rocksteady debe de tener la llave para sacar de este anquilosamiento al Señor de la Noche, sólo ellos saben cómo innovar y revolucionar el personaje sin caer en el agotamiento y falta de ideas de las que hace gala esta entrega. Ya lo hicieron en dos ocasiones, estamos convencidos de que volverán a hacerlo, ya en las consolas de nueva generación. El Caballero Oscuro está en buenas manos.
Buena historia, quizás la mejor de la saga
La Batcueva
El viaje rápido
Algunos bugs molestos pueden condicionar la partida
Gráficamente inferior a Arkham City
Jugablemente no aporta casi nada a la saga, muy conservador
Gotham City es un páramo